El vestido había llegado y la novia, emocionada, tomó el paquete para abrirlo. El color surgía un poco diferente, mientras aparecían los primeros rasgos del mismo. Luego, cuando lo terminó de sacar, se dio cuenta de que no se parecía en nada a lo que había visto en Internet. Ahora tenía que hacer una nueva inversión. No es una historia muy particular o única, no sabes cuántas veces hemos leído eso. En esa categoría encontramos también la historia del fotógrafo que no apareció con las fotos o la wedding planner que no llegó, y no las queremos más.
Por eso te traemos los consejos de algunos de los proveedores que encuentras en Zankyou. Síguelos para evitar que la inversión que haces en uno de los días más soñados de tu vida, no resulte frustrada por causa de alguna persona sin escrúpulos (¡sin corazón!). Recuerda el dicho de las abuelas: “más sabe el diablo por viejo que por diablo”, antes de contratar, sigue los consejos de nuestros proveedores expertos y ¡no te dejes engañar!
- La estafa en los anillos
- La estafa con el fotógrafo
- La estafa en la organización
- La estafa con el clima
- La estafa del vestido
1. La estafa en los anillos: piedras no tan ‘preciosas’
Nuevamente volvemos a la sabiduría popular: “lo barato, sale caro”, dice el refrán de las abuelas y no se equivoca. Claro que sí, vas a encontrar “diamantes y piedras preciosas” de todo precio. Pero la verdad es que una piedra preciosa de verdad y de buena calidad, suele resultar costosa. Piensa en esto: se supone que esa piedra y el metal que escogiste, simbolizan una vida entera de unidad. No puede ser que el símbolo se desgaste al año o se vea rayado y viejo. Es importante que conozcas el significado de las piedras que quieres lucir en tu anillo de compromiso y argollas de matrimonio.
La recomendación de Camilo Liévano, de la reconocida Joyería Liévano, es que busques joyerías de tradición, que te orienten sobre materiales, calidad y cuidados. Otra ampliamente recomendada por Zankyou es Joyería Trimooni, en su blog encontrarás más consejos para evitar ser estafado acerca de este símbolo de amor.
2. La estafa con el fotógrafo: portafolios falsos
“En este momento tengo a una pareja de novios que se contactó conmigo 15 días antes del matrimonio. Habían pagado un anticipo de dos millones de pesos a un fotógrafo de bodas y unos 20 días antes del matrimonio, dejó de dar señas de vida”, nos cuenta Jonathan, fotógrafo de Capturing Dreams, quien además nos explicó que es muy común que a través de Internet, las parejas se encuentren con portafolios falsos (fotos tomadas de otros fotógrafos) y que luego no pueden realizar el día de la boda o peor aún, fotógrafos que nunca llegan a la boda.
Es muy importante estudiar a la persona que piensas contratar: ¿tiene página web? ¿redes sociales? A veces la oficina física puede darte certeza. Haz esta investigación por Internet, no te tomará mucho tiempo. “Desconfíen de la empresa que tenga ocultos los comentarios en sus redes sociales”, dice este fotógrafo.
Otra recomendación es que tengas un contrato firmado por notaría. Por último te invita a contratar fotógrafos referidos sobre todo por amigos y conocidos. Encuentra los mejores fotógrafos para tu boda en nuestra lista de proveedores.
3. La estafa en la organización: el wedding planner ‘fantasma’
Como sucede a veces con los servicios de fotografía, también sucede con los organizadores de bodas en ocasiones. No se sabe qué es peor. ¿Te imaginas llegar al lugar y darte cuenta de que la boda no es ni la mitad de lo que te habían ofrecido en fotografías o por Internet? El wedding planner no aparece durante el día de la boda y los proveedores no cumplen ni con la mitad de las expectativas que te había generado el organizador.
Nuestra recomendación es que te asegures de que tu wedding planner sea del tipo que siempre está disponible para ti. Agenda citas regulares de trabajo, asegúrate de que las cumple, busca referencias, así como nuestros listados de los mejores wedding planners. Y no dejemos de lado, las precaucaciones a tomar según lo que la experta en bodas, Stephanie Escalante nos dice:
Desconfía de quien te diga que con 20 millones de pesos logra hacer una boda para 80-100 o más personas. Suena un poco duro hablar de cifras pero es lo más real y acertado en estos momentos.
Un plato de comida en un buen restaurante no cuesta menos de $60.000 por persona. Si una pareja, solo en ese ítem hace el cálculo de multiplicar el valor por 100 invitados, serían 6 millones de pesos. ¿Y el resto de las cosas como locación, decoración, bebidas, maquillaje, peinado, fotos y video, música, entre otros? Stephanie Escalante
4. La estafa con el clima: ‘una experiencia derretida’
Mucho cuidado con aquellos proveedores que te quieren complacer a toda costa. Hay cosas que simplemente no se pueden conseguir y si alguno te sigue la corriente en todo, ponte en modo alerta. La característica de un proveedor confiable es que tiene la capacidad de decirte verdades que pueden no gustarte, con tal de lograr el mejor resultado para ti. Y organizar en Colombia una boda en clima cálido pueden tener sus exigencias para ciertos productos como las flores que se pueden marchitar si no son bien escogidas y si no se saben cuidar para que conserven su lozanía a lo largo del evento.
También sucede con la torta de matrimonio y las mesas de dulces; la directora de Sugar Queen nos contó el caso de una novia que quería determinada crema en su torta y la quería expuesta al aire libre, en Cartagena. Ella le explicó que el calor y la humedad harían que el tipo de crema que quería, se derritiera, pero la novia estaba obstinada en su posición, así que buscó otro pastelero que la hiciera. Así la obtuvo el día de la boda.
A los pocos minutos, la crema se había derretido toda dejando el ponqué desnudo o peor, con aspecto de mal embadurnado. Nunca está de más que te den un buen no.
5. La estafa del vestido de novia: ‘cuidado con Internet’
Quizá una de las más dolorosas y a la vez de las más fáciles de evitar, pero curiosamente, una de las que más suceden. Entras a Internet y ves unos diseños increíbles en vestidos de novia a precios que casi no puedes creer. Pides uno de esos diseños. Luego, cuando han pasado los 30 días que suelen durar estas entregas, llega el vestido a casa (ya se ha comido 30 días que podrías haber invertido buscando vestido) y te das cuenta de que no se parece al diseño y de que la tela es absolutamente ordinaria. Hay que no tener corazón para vender un vestido así.
Nuestra recomendación siempre ha sido que prefieras ir tú misma y visitar las tiendas de vestidos de novia, medirte el vestido frente al espejo, vivir la experiencia de encontrarte con el tuyo y reconocerlo de un momento a otro, como cuando das con un amor a primera vista. Otra sugerencia que tenemos para ti es que prefieras a una diseñadora, en este caso el vestido saldrá de tu corazón y se hará realidad solo para ti, y solo para tu boda.
¿Conoces el caso de alguna novia que haya sido estafada en su boda? En el mundo de las bodas, como sucede en los demás ámbitos en el que medien inversiones, suelen haber personajes de malas intenciones. Evitarlos es más fácil de lo que se pueda pensar: basta con que tengas un buen referente que te pueda aconsejar y explicar cómo deben ser las cosas. Para eso estamos nosotros. También te puede interesar conocer los peinados de novia con velo y las 10 tendencias en bodas 2020 y 2021.
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