Si algo aprendimos de Po (¿recuerdas, Kung Fu Panda?), es que nunca debemos subestimar el poder de una entrada dramática. Estando ya tan cerca del día d, queremos ponerte a pensar en cómo puede ser ese momento en que tú y tu pareja entren por la puerta del lugar en que será la celebración, de la mano, quizá después de la sesión fotográfica de recién casados y se encuentren con todos los seres queridos que invitaron a su fiesta.
¿Es necesaria la entrada?
Se supone que esa es la primera presentación en sociedad de la pareja como esposos. Hasta el momento, en su exitosa trayectoria como wedding planner, Ángela López Eventos no se ha encontrado nunca con una pareja que no quiera el momento de la entrada. Ella nos explicó cómo suele hacerla para que encaje a las mil maravillas dentro del minuto a minuto de la organización de tu boda.
Actores principales y secundarios
Según su explicación la costumbre original contenía un momento en el que la corte de honor, damas a un lado y caballeros al otro, recibían a los novios.
Los protagonistas, tú y tu pareja, pasan por medio de ese camino, que según su sugerencia podría estar alumbrado por luces de bengala en las manos de quienes lo conforman. También podrías obviar la corte —sobre todo si no tienes— y que sean tus invitados los que te esperen; o simplemente entrar acompañados de una buena canción: los que te aman y están felices de tu alegría, seguro se pondrán de pie para aplaudir al nuevo matrimonio.
Ambiente
Crear una atmósfera adecuada para la entrada de los recién casados al lugar de celebración, es prioridad para empezar con pie derecho lo que será un gran momento de alegría y diversión. La idea es que sea un momento especial. Si es con un DJ, este se encargará de encender y dirigir las luces, al tiempo que hará que suenen esas canciones que recuerdan tu historia con tu pareja, el amor de los dos.
Y para ello debes tener muy claro los pasos para elegir muy bien la música en tu boda. El DJ Nicolás Rojas nos da una mano en este punto, partiendo de su propia experiencia.
Lo primero es que escojas bien al profesional para que esté en armonía con los tiempos y movimientos. Recuerda que por lo general, la entrada no dura más de 1 minuto y es este el que deberá saber escoger esa parte de la canción que los acompañará.
No pierdas tiempo
Las cosas suelen suceder de esta manera, te lo contamos para que estés enterada: primero la ceremonia, después está el coctel. Si estás en una locación al aire libre, seguramente querrás aprovechar la vista para tomarte fotos con tu pareja mientras tus invitados se deleitan con los pasabocas y las bebidas.
Lo ideal es que luego tus invitados pasen al salón, donde una vez estén todos, deberías entrar tú con tu pareja. No los hagas esperar. La música será suficiente expectativa para ellos, si eso es lo que quieres producir. Conoce estas 5 maneras de hacer sentir especiales a los invitados.
Lo que viene después
Es importante que lo tengas presente para que lo converses con tu wedding planner durante la organización. Lo más seguro es que la música ceda su lugar a las palabras del brindis, que después de eso venga la cena y tras esos momentos, venga el primer baile, que puede ser una opción diferente al vals. Así que ten cuidado con la elección de las canciones para los respectivos momentos: puedes escoger una para la entrada y otra para el baile, si ustedes como pareja tienen dos o más canciones que los representan mucho, esto les funcionará bien.
¿Recuerdas cómo empezamos: hablando de una entrada dramática? Bueno, no te lo tomes literal. Lo ideal es que la gente pueda sentirse cómoda para celebrar que ustedes dos se casaron. Pero tampoco lo tomes como algo sin importancia: ustedes son los celebrados y tienen que poner la actitud en todos los momentos para que los invitados se dejen llevar a una buena celebración. Nada está escrito en una boda, puedes dejar volar la imaginación con ideas sorprendentes para la llegada y entrada de los novios.
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