Tus invitados se llevan muchas cosas para el recuerdo: existen las tías que no se resisten a pedir un pedacito de ponqué envuelto en una servilleta, las abuelas que se piden el centro de la mesa y las novias que sueñan con casarse y se llevan el menú para mostrarle a su novio cómo quieren que sea la decoración cuando se casen. Pero realmente solo hay tres cosas en las que tú debes pensar para tus invitados: el ‘kit de desenguayabe’, la invitación y el recordatorio.
No todas las parejas tienen la necesidad de hacer el kit, pero todas sí suelen tener una invitación para su matrimonio y un recordatorio. Aunque nuestro enfoque hoy es mostrarte un recordatorio ideal, no vamos a dejar que desaproveches la oportunidad de saber que encuentras tres soluciones en un mismo lugar. Para hablarte de las fotocabinas, contamos con la asesoría de los expertos de Fotocabinas Rasgo, quienes además de participar en bodas con estos equipos y montajes, también ofrecen el servicio de diseño de invitaciones en Tarjetas Rasgo.
A nosotros nos pareció ideal porque además de encontrar los dos servicios en un mismo lugar —lo que ya representa un ahorro de tiempo—, puedes tener la ventaja de que todo conserve una misma línea. La explicación es sencilla: supón que de entres los diseños de invitaciones para boda de Tarjetas Rasgo (más o menos unos 45), escoges el que parece un pasaporte. La tipografía y el color vas a poder conservarlos no solo en tu menú sino hasta en las fotografías que se hagan tus invitados el día de la boda. Como las marcas, pero solo para tu boda.
Si bien Tarjetas Rasgo también podría hacerse cargo de hacer el tipo de recordatorio que quieras (en sus tiendas vas a encontrar más de 50 estilos que van desde diseños funcionales como tapones para botellas de vino hasta los meramente decorativos) y con toda seguridad podrían ponerle tu estilo a menús o marcapuestos, la más divertida de sus propuestas para llegar a la memoria de los novios son las fotografías.
¿Qué tiene de divertido una foto? Bueno, pues empecemos por tomársela. ¿Recuerdas esas fotografías de grupos de invitados al frente de la mesa? Estás esperando la comida y de repente llega el fotógrafo para hacerte poner de pie cuando lo que quieres es comer, te pide que sonrías y luego el flash. ¿No sería mejor en un espacio diseñado específicamente para eso? Eso fue lo que pensaron los creativos de Fotocabinas Rasgo y por ese motivo empezaron a ofrecer este servicio.
Para esa propuesta tienen un photobooth, una de sus máquinas fotográficas que se ubicará en el espacio que tu destines para que los invitados vayan, se pongan sombreros, gafas gigantes, corbatines o pelucas y con la asesoría de dos asesores fotográficos, se dediquen a posar como quieran, ponerse el accesorio que prefieran y divertirse frente a la cámara. También disponen de una cabina fotográfica, en la que el ambiente es ella misma. En las dos, la característica es que te desconectas del ambiente de la boda y sientes la libertad para divertirte mientras te toman fotos.
Pero la ventaja no es solo que los invitados se diviertan frente a la cámara. Además cuenta que esas fotografías van a quedar para ti. Sí, aunque Fotocabinas Rasgo ofrece impresiones inmediatas para que los invitados se la lleven con tu nombre y el de tu pareja impreso, una copia de las fotos queda para ti. Así no pierdes nada de la historia de ese gran día, las fotos te resultan por partida triple: para ti, para tus invitados y unas copias que quedan en la web, para que las puedas publicar en redes sociales. Muchos beneficios.
Si se van a llevar un recuerdo que sea bueno. Seguro ya pensaste en una comida, en una decoración y en una selección musical que los sorprenda. Bueno, pues deberías darle la misma fuerza a los recordatorios, al fin es lo que les va a traer a la memoria, tanto a ellos como a ti y a tu pareja, ese día que marcó el nuevo destino de tu historia.
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