Hoy en día conservar el matrimonio parece ser una tarea cada vez más complicada. Muchas parejas lamentablemente deciden separarse porque no logran entenderse ni asumir el compromiso. En este proceso se pueden ver implicados los hijos, los cuales pueden sufrir efectos en su vida personal y repercutir luego en sus relaciones interpersonales, porque sencillamente no ven un modelo de familia ni tampoco se fortalecen los roles que cada uno de los miembros desempeña en la sociedad.
Un reciente informe de este año, realizado por la superintendencia de notariado y registro en Colombia, revela que, de cada diez parejas que se casan, tres se divorcian, y un alto porcentaje lo realiza durante los primeros tres años. Crecer en un hogar de padres separados puede dejar consecuencias irreparables en la vida de sus hijos. Según un estudio de la University College Dublin, puede ser incluso más graves que la misma muerte de alguno de los padres. Las dificultades en el proceso de crecimiento, sentimientos de pérdida, de tristeza, ansiedad, y el sentirse desprotegidos son algunos de los efectos.
Judith Wallerstein experta en el tema, establece que los hijos del divorcio, preocupados por no repetir los errores de sus padres evitan comprometerse, mientras que otros van por impulso de relación en relación con gente que apenas conocen.
Nosotros somos fieles creyentes del amor, sabemos que no es fácil superar las heridas del pasado, pero si tienes la disposición de dar un paso más en tu vida y eres capaz de perdonar, todo será posible. Mira estas 5 razones para volver a creer en el matrimonio aunque hayas crecido en un hogar de padres separados.
1. Complementa tu felicidad
Debes tener claro que el casarte no significa la felicidad, es un complemento a ella. Poder encontrar una persona con la que quieras pasar tu vida y amarla hasta el final hará que tu vida sea más fácil, que cada día te levantes con esas ganas de hacer las cosas bien y sentir que puedes brindarle a tu ser amado lo mejor de ti. Mira los 10 hábitos que las parejas deben hacer día a día para ser muy felices.
2. Disfrutas tus mejores años
Nada mejor que crecer junto a la persona que elegiste para ti. El tiempo pasa cada vez más rápido, y si tienes anhelo de formar una familia que mejor que hacerlo en compañía. No importa que tú hayas tenido que enfrentar dolor por la separación de tus padres, ahora es tu momento, es a tu propia vida a la que debes darle la oportunidad de amar.
3. Aprendes a creer en ti
El miedo a los errores nos impide avanzar y lograr los objetivos. Todos los seres humanos somos más fuertes de lo que creemos. Cuando amamos nuestra vida, podemos amar a otros, aprendemos a respetar, a dar y a sentirnos seguros.
4. Te liberas del egoísmo
El pensar en los demás es el mejor regalo que podemos dar. Nuestra razón de ser cobra sentido cuando dejamos de pensar sólo en nosotros mismos y aprendemos a amar. Imagina tu vida compartiendo a otra persona tus logros, tus secretos, tus miedos, tus sueños, y que juntos puedan apoyarse y lograr objetivos juntos. Conoce las 10 cosas que debes dejar a un lado para ser la novia más feliz y plena.
5. El amor es un sentimiento que transforma
Las heridas del pasado sólo podrán ser restauradas con el amor, este es un sentimiento que libera, que te permite sentir que vale pena darle una oportunidad a la ilusión, sentir siempre el apoyo de alguien en las buenas y en las malas, y sobre todo te permite empezar de nuevo. ¿Quieres suspirar de emoción? Mira las 25 mejores películas de amor que tienes que ver.
No dejes que las situaciones y los recuerdos que hayas enfrentado en tu niñez a raíz de los errores de tus padres, repercutan ahora en tus decisiones de formar una familia. Estamos hechos para amar y sobre todo para superarnos. ¡De eso se trata la vida! Si quieres tener más motivos para casarte, no dejes de leer las 50 razones para casarme contigo.
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