De todos los momentos del día de la boda, hay uno que está particularmente envuelto de misterios, intriga y pasión. Suena un poco exagerado, pero no podemos negar que algo de real tiene. Las despedidas de solteros se han convertido en toda una clase de sexualidad y es el espacio donde ves regalos, objetos y prendas que jamás te imaginaste que existieran… Sí, eso también es una exageración. Pero ese fenómeno se debe a la altísima importancia que se le concede a la noche de bodas. Y aunque sea un momento importante, puede estar plagado de mitos. Parejas que ya pasaron por ahí, nos ayudarán a superarlos.
Expectativas
Si hay un escenario socialmente aprobado para el acto sexual, ese es el matrimonio. Y de hecho, hay quienes afirman que beneficia a la vida íntima, por lo que deberías conocer las cosas que cambiarán en tu vida íntima al casarte, ¡atención a la 3! Parece que en esta noche nada puede salir mal y que tanto los hombres como las mujeres deben dejar el 100 por ciento literalmente, conseguir que el otro pase la mejor noche de su vida. Él debería resultar un enérgico e invencible Adonis y ella debería ser toda una diosa sensual… ¿Es en serio?
Llegar sin defectos
Resulta que tienes que ser una mujer perfecta, de esas que sólo existen gracias a los programas de edición en las revistas y en Internet. La pregunta sería, ¿por qué tendrías que verte mejor en esa noche que en las demás? ¿En serio piensas que habiendo pasado por la decisión más importante de su vida esto podría tomar un lugar más importante? Ya es bastante con tener a la persona que amas acompañándote en la noche de bodas, es un regalo saber que la podrás tener por infinidad de noches a partir de este momento.
Si se conocían con defectos o si saben que a fin de cuentas los años vendrán, ¿por qué exigirse más? No tienes por qué sentirte mal contigo misma para esa noche. Sin embargo, si quieres hacerlo como una especie de regalo para tu pareja, será genial para los dos, por lo que te convendría leer ¿cómo tener el cuerpo perfecto para el día de tu boda? ¡Tres ideas que te funcionarán!
Tiene que ser perfecto
Bueno, hay que poner el día en perspectiva: vienes de haber madrugado, porque seguramente estuviste en las actividades de la boda durante todo el día. Luego, en el transcurso del día, están las novias que se deciden por no comer durante el día; después está el cansancio acumulado, no solo se trató de un día con ajetreo físico, sino que además estuvieron enfrentados a altas presiones emocionales y para concluir están las expectativas de perfección tanto física como de comportamiento. Tu sexualidad no se va a aislar de esas realidades, así que puedes estar segura de que tal vez no sea perfecto. Pero el sexo como manifestación de amor entre la pareja, es mucho más que eso.
¿Y si no pasa nada?
Sí, está bien, alquilaron una habitación de hotel para ese propósito exclusivamente y se prepararon con depilación y comprando ropa especial para el momento, pero ¿es una obligación que sea una noche de pasión desmedida? Claro, ¿a quién no le gustaría? Pero hay que considerar seriamente la posibilidad de que no suceda nada, porque ha sido un día pesado, porque el alcohol juega en nuestra contra en estas situaciones, pero sobre todo porque un amor que se ha comprometido para siempre, no necesita que pase algo, si o si, en esa noche, no importa que todos la llamen noche de bodas. Descansar es muy viable en una noche de bodas.
¿Mañana de bodas?
¿Y por qué no? El mito de que el deseo sexual se activa con el guayabo, circula por las calles y aunque corresponde a factores meramente psicológicos y no se da en todos los casos, sí hay una verdad acerca de tener su faena al día después de la boda: van a estar descansados por lo menos. Si ustedes son de esas parejas que prefieren moderarse en el consumo de alcohol, entonces la mañana posterior a la boda va a parecerse un poco más al momento que tanto estaban esperando y van a quedar mejor preparados para su viaje de luna de miel: ¡con mejor ánimo, más vigorosos y hasta con mejor aspecto!
¿Y la luna de miel?
Todos tienen expectativas acerca de los días que ustedes van a estar fuera de la ciudad y compartiendo en algún lugar romántico. Y aunque sean parejas casadas que ya lo han vivido, algunos se imaginan que se tratará de una especie de encierro voluntario y programado. ¡La verdad es que no! No compraron pasajes, planes turísticos o habitación de hotel en un lugar paradisíaco, para encerrarse a hacer lo que la mayoría de parejas ya vivieron y que además van a hacer por el resto de su vida. Cuando vuelvan, todos les van a preguntar, (con ese gesto que manifiesta el doble sentido), qué tal estuvieron las vacaciones, pero realmente quieren que les respondas por lo que hiciste fuera de la habitación.
Esa es una temporada para coleccionar recuerdos. Sexo podrán tener por mucho más tiempo después, no se sientan presionados por eso. Un buen plan podría ser hacerse una sesión ‘Trash the dress‘, ¡uno de los mejores fotógrafos de bodas en Cartagena podría acompañarlos en eso!
Para concluir…
Vivimos en una sociedad que algunos han calificado como ‘hipersexualizada’. El sexo está en todo: desde un anuncio de venta de cigarrillos hasta un chiste de oficina. Uno de los asuntos más graves es que el sexo se ha llegado a confundir con el amor, cuando en su naturaleza puede ser una manifestación del mismo o ser independiente de él.
El amor, para ser amor, no depende del sexo; se complementa con él mismo, pero no lo necesita para subsistir. Nadie quiere que su noche de bodas sea una situación forzada, sólo porque se supone que pasará algo fuera de lo común. Hay otras formas de disfrutar entre los dos y con el curso del tiempo las irán conociendo. Y si la noche de bodas llega a ser el momento de la primera lección, ¡bienvenida sea!
De eso se trata la noche de bodas: de disfrutarse el uno al otro, al hecho de ser los dos uno solo para siempre, ¡no se preocupen por más! Te puede interesar saber cuáles son las cosas que pasarán si o si en el primer año de casados o los secretos para triunfar en la convivencia.
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