Personalmente nunca he creído en las casualidades, creo más bien que tenemos un plan trazado por Dios para nuestra vida. Ese plan perfecto nos lleva a lugares, momentos, situaciones y personas. Mientras tanto, la vida es eso que pasa frente a nuestros ojos, el camino que recorremos mientras intentamos seguir este plan, por eso es que estoy convencida que cada instante tiene un precio incalculable, porque pueden suceder cosas que no imaginamos, cosas que nos cambiarán la vida para siempre.
Esto nos lleva a la apasionante historia de Johana y cómo conoció al amor de su vida, Rocco. Solo bastó un momento, breve, para muchos fugaz, pero para ellos eterno. Hoy te contamos su historia y el desenlace feliz, en una boda mágica e inolvidable.
Johana de Colombia y Rocco de Estados Unidos. Ella estaba estudiando en la universidad en Orlando, Florida y él, aunque nació en New York, estaba viviendo ahí por su trabajo. Una vez más compruebo que nada es una casualidad. Se conocieron una noche, como cualquier otra, en la que Johana iba a salir con una de sus amigas, lo curioso de todo es que su amiga tenía un pretendiente, sin embargo, le insistió a Johana para que fuera con ella, ya que no quería ir sola a su cita.
Aunque ella dudó al principio si acompañarla o no, al final accedió. Todos se reunieron en la casa de Rocco, que aunque no quiso salir de fiesta esa noche, quedó impactado desde el primer momento con Johana, le escribió por Facebook y desde ese momento comenzaría una historia que los llevaría al altar.
La pedida de mano fue espectacular. En el 2014, los dos planeaban un viaje a París, Johana soñaba con tener un picnic al mejor estilo parisino y claro, junto a Rocco. Él aprovechó la oportunidad y decidió que ese era el instante indicado para pedirle que fuera su esposa. Una vez llegado el momento, le pidió a Johana que se arreglara para que les tomaran una foto a los dos y mientras él se iba a buscar al supuesto fotógrafo, lo que hizo fue arrodillarse, sacar una cajita de color azul y pedirle que caminaran juntos por siempre.
En ese momento, la persona que les iba a tomar la foto no supo como manejar la cámara y los interrumpió cuando Rocco se arrodillaba. Superado este momento ella dijo emocionada y sin dudarlo que si aceptaba. Luego, caminaron hasta la Torre Eiffel, donde sellarían su promesa de amor.
La boda sería en febrero del 2016. Y Cartagena, La Fantástica, el mágico escenario en el que Johana y Rocco darían el SI definitivo ante Dios. La ceremonia, muy emotiva, se llevó a cabo en La Casa Pombo y la recepción posterior en El Marqués Hotel Boutique, un lugar perfecto no solo por su arquitectura, además por sus espacios, ideales para una boda de ensueño.
El vestido que seleccionó Johana fue de la firma catalana Rosa Clará y como si hubiera sido preparado desde antes, el nombre de este hermoso diseño era “Colombia” y consistía en un diseño corte princesa, compuesto por un escote palabra de honor con abertura en el centro, del cual se desprendía una falda larga con pliegues y un velo que complementaba de la mejor forma esta elección. Johana se veía espectacular con su vestido, que además estuvo a juego con los zapatos del diseñador Badgley Mischka, de estilo d’Orsay, en un color azul que combinaba con el traje del novio.
Del peinado de Johana se encargaron los especialistas de Diego Moya-Salón And Day Spa. Mientras que el maquillaje fue creación de una amiga de la novia. Por su parte, Rocco, que lucía muy elegante, se decidió por un traje azul oscuro, un smocking hecho a medida por Monsieur Brunold, acompañado por unos zapatos negros de Kenneth Cole. ¡La combinación perfecta! Johana solamente utilizó, para complementar su espectacular vestido, unos aretes que compró en la tienda Nordstrom.
Las argollas, que serían el símbolo de esta unión, fueron compradas en Manhattan. Y es que era imposible no emocionarse, al ver a los novios irradiando felicidad y amor, con cada palabra, con cada gesto, con cada mirada.
Prueba de la felicidad de este día son las imágenes tomadas por el lente de Juyá Photographer, uno de los fotógrafos más talentosos de Colombia, que supo capturar una a una todas las emociones de la boda de Johana y Rocco, estas fotografías quedarán como el recuerdo tangible de uno de los días más importantes en la vida de esta pareja, pues cada una cuenta un momento, un instante, una sensación, una historia.
Cada imagen refleja el trabajo artístico y profesional, dando como resultado final capturas auténticas y diferentes, gracias a su energía, pasión y entrega en cada toma.
La fiesta fue en El Marqués Hotel Boutique y la decoración de las mesas consistió en manteles color champagne, centros de mesas que surgieron de una idea de los novios: consistían en botellas de vidrio de diferentes tamaños y formas, que dentro llevaban orquídeas dendrobium y cymbidium de color vino tinto/berenjena, rosas color crema y mini calas, también de color berenjena. Cada mesa tenía un letrero con un marco vintage con el número. El catering fue obra del mismo hotel, gracias a la exquisita elección por parte de los novios, todos los asistentes se deleitaron con el menú.
La celebración fue única. Uno de los momentos más emotivos se dio cuando el primo del novio interpretó la canción “Can’t take My Eyes Off of You” de Frankie Valli. Una canción que les encantaba a los novios. Aunque no hubo coreografía, nadie se quedo sentado. El primer baile, con el que dieron paso a la fiesta fue la canción“First Day of My Life” de Bright Eyes.
La hora loca sería inolvidable. Todos los asistentes se sorprendieron cuando los novios aparecieron con un vestuario diferente, junto a músicos y bailarines. En ese momento la fiesta se puso mejor que nunca, todo el mundo utilizaba algún elemento característico, entre sombreros y antifaces y bailaron sin parar, desde los grandes hasta los más pequeños. Las imágenes hablan por si solas.
Este fue un día inolvidable para Johana y Rocco, que disfrutaron de su boda mágica, es tiempo de devolvernos atrás en el tiempo, a la noche en la que se cruzaron por primera vez, esta también fue una noche mágica, en la que él se enamoró de la mujer que ahora es su esposa y con la que quiere caminar durante toda la vida.
La ceremonia se realizó en: La Casa Pombo |La celebración se realizó en: El Marqués Hotel Boutique |Fotografía: Juyá Photographer | Peinado de la novia: Diego Moya | Vestido de la novia: Rosa Clará | Zapatos de la novia: Badgley Mischka| Vestido del novio: Monsieur Brunold | Zapatos del novio: Keneth Cole | Argollas de boda: Venus Jewelers | Recordatorios: Etsy
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